
Fotografía de Ángel Navarrete.
María Castrejón nació en Madrid en 1974. En 2008 publicó la guía de narrativa lésbica …Que me estoy muriendo de agua. Su primer poemario, Volveré mucho más tarde de las doce fue finalista del Premio Internacional de Poesía de Torrevieja y Premio de Poesía Desayuno en Urano. En 2013, publica, junto a la artista Sandra March, el libro objeto Cuervos vienen carne huelen, y ganan el Premio Internacional de Poesía Experimental Francisco Pino al presentar un fragmento de este impreso en una servilleta. En 2015 publica con Huerga & Fierro el poemario Niñas y en 2017 La inutilidad de los miércoles (Huerga & Fierro), en el que habla sobre su experiencia con el Trastorno Límite de la Personalidad. Ha sido Primer Premio en el Certamen de Poesía “Aguas Subterráneas” en el Teatro de las Aguas.
Ha participado en distintas antologías poéticas y de cuentos, como Ménades, Relatos marranos, Europa, Las chicas con las chicas, El cielo en Movimiento, Donde no puedas amar no te demores… Desde la perspectiva de género y en el margen del arte ha trabajado en diferentes disciplinas como la performance (Envuelve tu carne en una obra de arte, Te vas a comer mis palabras, Niñas…), el vídeo (Querencia: reciclando el espacio, Un café por un sueño, Trece maneras de mirar a un mirlo) o el cómic con Enjambre (Norma). Experta en género, ha escrito artículos y ha dado conferencias en diferentes universidades y talleres.
***
No me sale del coño
escribir
me sale de los orificios de mis orejas
del recuerdo de unos
pendientes
de un hilo
dental
del hueco de tu muela
No me sale del coño
me sale de la vista cansada de pagar a Autónomos,
ni siquiera mi hijo
me salió del coño,
me sale de las cicatrices de las bicicletas
de los ojos frescos de los pescados
de las lenguas de los corderos
del coño de los otros
de la ausencia del frasco
de las pequeñas esencias
del olor a sudor en los colegios
No me sale del coño
escribir
me sale de los cobardes
que se comen a los muertos
y a los enfermos
que los arropan mientras hablan por teléfono
de las bragas talla –s
Nada me sale del coño
ni me entra
no tengo coño
Me sangra la mano
cuando escribo:
“¡No me sale del coño
escribir!”
No me sale pedir la vez
meto los pies
sin permiso
en el vaso de agua
me ahogo en el supermecado
y en los tenedores
me sale moho en la cortina
se me cae el alcohol de la cerveza
¡No me sale!
¡No me sale!
¡No me entra
en la cabeza!
No me sale del coño
escribir
me sale de los máster del universo
editorial
económico,
ni siquiera mi hijo me salió del coño
No tengo coño
¡no me sale del coño tener coño!
No me sale del coño
escribir
me sale del agujero del mundo
*
deméter
Me duele tanto útero
cuando araño la tierra.
Soy la madre de la comida congelada
y de los olivos que acampan a las orillas del mar
junto a los cuerpos desgastados
de los niños alcohólicos
Después de buscarte en el infierno
supe
que me rescataba la boca
que llenaba la bolsa de la compra
con alimentos saturados de grasas saturadas
con los que ver la tele
hija mía, me duele tanto útero
porque me escribieron
me pintaron
me esculpieron
madre
arrastro mis zapatos planos por la sección de
[bisuteríay nacen flores
parece hermoso
y es triste[34]
cada vez que camino
injerto células en los poros del
aire
los restos de mi piel son untados en los senos
de una mujer que llora los años que ya no tiene
y que se retuercen en las piernas
cada vez más largas
de sus
retoños
no deseo el abrazo de un hombre
no deseo un abrazo
espero la primavera que cada vez es más invierno
en mi cabello y en el contorno
de tus ojos
hija mía
ahora estás tú pagando mi rescate
con bonos de masaje en un spa
sé que temes que me deprima y asole el clima
[mediterráneo,pero no es culpa tuya que me violara un toro,
o lo que fuera tu padre cuando no era agua corriente.
Sé que tú también tienes una úlcera en el útero
y eso no es grave
pero es
vuelve a tu casa a recoger el libro que se le calló
[a tu marido en el sueloo construye una casa al lado del mar
o alquila un cuarto por horas,
pero cierra la nevera,
que ya hace mucho frío.
*
las reglas del ju-ego
Fue mi hermano o mi madre
quien perdió las reglas del monopoly.
Era más fácil cuando solo había un cine y un libro.
Nadie sabía leer o eran ciegos de un dedo
del índice
de la lista de la compra
de las instrucciones de los tampones.
¡Quiero ir a la piscina!
Tengo 11 años y me sangran los muslos cuando nado.
Soy sucia y hermosa como las tiritas pegadas en
[el asfalto.Mamá llevaba un niño dentro y otro fuera
luego yo
con mis piernas cortas y fuertes
y rotas por la piel,
manchadas las rodillas de costras
que anuncian tiempos peores
o solo tiempo.
¡Qué envidia me dan los esguinces y las brechas
mientras me levantan la falda en el colegio!,
quizá por eso es por lo que amo los clavos de tu
[tobillo.Es lo que tiene levantar una piedra:
escorpión o bicho bola
gas o veneno.
Ella eligió gas,
yo, veneno.
Volveré mucho más tarde de las doce. Egales/Desatada, 2011.
**
Niña nº2
Soy la niña que solo tiene miedo al miedo
cuando lo tiene encima en la cama
Ni siquiera las náuseas que me causan los aparcamientos
me hacen huir de lo subterráneo
Soy la niña que se choca contigo por la calle
y te clava los huesos de la cadera
ansiosa de provocar un derrame desconocido
Soy la niña que te devuelve el placer
de llorar bajo el agua de la ducha
la que aprendió a escribir anónimos en el colegio
Soy la niña que está detrás de ti en la cola del pan
y lee gratis los titulares de tu periódico
Soy la niña
la que dibuja con el tedio de los enfermos terminales
la que arrastra los zapatos esperando una buena regañina
Soy la niña
la niña que solo tiene miedo al miedo
cuando lo tiene encima en la cama
Durante toda la noche voy tejiendo el frío de tus huesos
Solo necesito cerrar los ojos para parecer dormida
Soy la niña disfrazada de niña en la tienda de juguetes
A veces le doy la mano a alguna madre y le sonrío
*
Niña nº 8
Soy la niña que solo quiere follarte
sobre el asfalto ardiendo en el verano
cuando cruzas la calle sin mirar a la izquierda
Soy la niña que solo quiere follarte
te digo que separo la voz de la piel
y que te amo tanto como para que me des a tus hijos
pero solo quiero follarte
y quiero follarte solo yo
antes de que nadie llegue para que no te vayas
no tengo nada de qué hablar ni me interesa tu nombre
Voy recogiendo lo que se te cae de los bolsillos
me agradecerás la caja llena de basura
y vivirás conmigo en el mundo donde nadie llora
Solo quiero follarte
todo el tiempo
y te digo que es bonito que me la chupes despacio
que te abras de piernas para mí en mi castillo
que te amo tanto
que robaré los ahorros de tus nietas a los sin techo
para ti
para follarte tanto y todo el tiempo
me agradezcas que te folle
que te clave el tiempo que llevaba esperando este momento
que te clave en la sangre mi lengua extranjera
Sé que piensas cosas sobre la muerte prematura
sobre el cáncer de las madres de tus amigas
sé que escribes en algo que para mí no son más
que marcas de saliva y huellas de vasos
sé que quieres expresarte con todo ello
pero
ya te lo he dicho
yo solo quiero follarte
y follarte mucho
y follarte solo yo
en una cama que ni siquiera es mía
Por eso te digo te quiero tanto que me duele
cuando hablas y sonríes y te da el sol en las axilas
y esas fotos de otros sitios en los que nunca te he follado
me duele tanto que te quiero
tapar la boca
me encanta cuando me la chupas despacio
te amo tanto entonces
que me merezco que mueras ahogada entre mis piernas
*
Niña nº 11
Soy la niña que ya no te ama
No recuerdo exactamente el segundo
en que dejaron de interesarme
las imperfecciones de tu piel
Un día a tu lado en la cama
escuché abrirse el cajón de una cocina
fue como el trueno que inicia una tormenta
y tus susurros se me hicieron ridículos
tu placer se arrancó de mis hombros
Soy la niña, sí, la misma niña que te amaba en los colchones hinchables
pero ya no te amo nada
ni cuando paso la aspiradora
ni cuando miro los dibujos de las puertas
Tengo la sangre fría de calentar el té
sin pensar en las huellas del pasillo
Me importa una mierda que se partan
los mangos grises de los cubiertos
Soy la niña que ya no te ama
Me da vergüenza imaginar cuánto me quieres por la calle
cómo me recuerdas follándote y te excitas
cómo lloras al limpiar la mancha de cerveza en la mesilla
No te amo nada desde que aquella tormenta
me sobresaltó en la casa
Tantas cosas escuché, la lluvia
tus gemidos tan ridículos y solos
pensé en la factura del teléfono móvil
y tú eras tan absurda gozando junto a la niña
que dejaba de amarte
tan ingenua sin leer los números del techo
Tenías prisa y te marchaste pensando en volver
mañana ya no entrarás en el portal
el cochecito de bebé sigue aparcado
los muebles de los vecinos de arriba se mueven
sin descanso todo funciona el agua escasa
y yo soy la niña que ya no te quiere
Ha sido tan sencillo dejar de amarte
Un acto inconsciente como quien cierra
el cajón de la cocina y hace un ruido
de tormenta
Niñas, Huerga & Fierro Editores, 2015
**
Tantas veces he querido matarte
cortarte los brazos hasta que un hilo
de sangre apague los supermercados
Lanzarte por la ventana entre las migas
del mantel y que tu cuerpo retumbe en
los oídos de las camareras y que sus
bandejas levemente vibren suene el hielo
en las terrazas donde las personas
fuman cerca de los carritos de bebé
Tantas veces he querido que duermas
para siempre más de cien años sin beso
sin luz y sin palabras lejos de la cocina
Tantas veces te he mezclado fregasuelos
con vino en la última cena nauseabunda
desde el frío suelo hasta el esófago que
arde y se deshace como la arena en los puños
matar es fácil pero quién soporta bajo la luna
el llanto del niño que ha perdido a su madre
*
Pertenezco a la estirpe de las trasquiladas porque me toca la sangre Se me negó el matrimonio se me prohibió la maternidad El último escalón de una sociedad que deja morir a las niñas Soy quien se coloca frente al cadáver de un cerdo o una cabra y viola las normas ancestrales de llegar hasta las vísceras Arranco el laberinto gástrico y mis uñas se llenan de sangre extirpo el hígado y me llueve rojo en los labios No pueden entrar mujeres ni niños en mi casa pero devoráis a mis hijos limpios del dolor de desmenuzar los huesos mientras ríos de sangre fluyen por mis brazos Pertenezco a la estirpe de las trasquiladas que manejan cuchillos y penetran la carne Despojo a los animales de sus pulmones mientras sopla el aire con los pies descalzos en el lodo que me inunda y me hace desmembrada cerda esquilada sin embargo devoráis a mis hijos limpios del trabajo repugnante del pasado Arranco el corazón las venas se vacían y los nervios son de utilidad como los huesos con los que coséis vuestros vestidos Desnuda despojada esquilada fértil y estéril oigo latir sola en mi casa el corazón del cerdo y la sangre de la cabra Vosotros devoráis a mis hijos mientras yo me tumbo en el barro del color del óxido y sueño con espinas dorsales
*
No me guardes rencor por el grito
es lo que me queda después de
haber nadado en colchonetas azules
No me guardes rencor por la voz
me salvó en los incómodos asientos
colocados en círculos No me guardes
rencor por el llanto llamé al timbre
para salir de la cárcel de la locura No
me guardes rencor por buscar respuestas
en las redes contaminadas por fotos
de atardeceres No me guardes rencor
si quiero tu voz me enseñaron a hablar
el idioma de los reptiles No me guardes
rencor por las palabras que me dan
y me quitan la matriz cuando vuelo
No me guardes rencor por la letra
con sangre entra en mi cuerpo
y no me guardes rencor mira dentro
el color de los pedazos del tiempo de
las islas pobladas por habitantes
solos No me guardes rencor por
llevarte de la mano al país extendido
por el mundo No me lo guardes
no me guardes en el silencio se me
rompe el cristal y cada fragmento
es un terrible monstruo de agua
*
Me subía a lo alto
del almendro y todos
continuaban con sus
actividades Yo era feliz
callada clavada en lo alto
Tantas veces
Mi padre lo cortó
para que cupiesen
más coches en el jardín
No lloré
Pero desee amputar
un brazo a mi padre
y colocar allí
una hermosa rama
de almendro
para poder por fin
abrazarle
La inutilidad de los miércoles, Huerga & Fierro Editores, 2017
Gracias María por tu poesía. Voy leyendo poco a poco. Cuando me sale del coño