A Etel Adnan llegué como a muchas otras lecturas recorriendo una biblioteca, esta era la de la Universidad Americana de Beirut. Quería saber qué y quién, ahí, recién llegada a Beirut. Cogí los libros a toda prisa. El campus es espléndido y marino, los jardines (muy cuidados) van cuesta abajo y llegaban a una planicie de naranjos. La biblioteca, para compensar, es fría de estantes metálicos y escaleras pequeñas, también metálicas que unen los niveles. Por ellas temía siempre caer, yo y el metal, oscuridad abajo. Libros cuidados, sí; y ordenados; no es esta la imagen de un desorden sino de un hangar. Correr con el libro hacia fuera es lo único que podía hacer. Iba a por una novela, Sitt Marie Rose (1978), su novela clásica de la guerra civil libanesa pero con las prisas me llevé todo lo suyo. No guardo otro recuerdo que el de el arrastre del material fuera y el de luego algo similar a la explosión. Otro recuerdo sí: el del dilema inicial entre el me gusta y no me gusta, entrar y no entrar del todo. De poesía me llevé The Arab Apocalypse (1989) y también la antología de The Indian Never Had a Horse (1995).
Poco después vi The Lebanese Rocket Society (2012) de Joana Hadjithomas y Khalil Joreige y escribí algo sobre “los habitantes del espacio” para Aish conectando ambos gestos de alzar la cabeza y mirar hacia arriba. Decía: “Con el mismo gesto, Etel Adnan, en The Arab Apocalypse, levanta la vista y ve un sol que «pace en el cielo como un animal atrapado», «un sol amarillo mi padre un asesino Tengo un sol en cada dedo», «un sol vendido en México pelado en Borneo mutilado en Beirut Vom». El gesto de Etel Adnan es el de quien levanta la vista tratando tal vez de no ver lo que hay abajo y sin embargo encuentra las mismas cosas, magnificadas, grotescas, surrealistas, inexplicables”. (Hay que decir que The Arab Apocalypse es, entre otras cosas, un lenguaje de pictogramas y mayúsculas, códigos y letras, texto e imagen).
Después de “los habitantes del espacio” traduje algunos poemas y con cuidado fueron entrando los soles y la tinta en mi lectura. Fue una lectura que mudaba de piel y fue en verano. Etel Adnan fue pronto una forma a veces lúdica y a veces feroz de vivir con algunas zonas oscuras de la violencia y lo bélico manejadas con un lenguaje exaltado, a saltos, cuidado también, lleno de recovecos. Al final Adnan trajo también consigo muchas cosas que no esperaba: por ejemplo Buland al-Haidari (poeta kurdo iraquí del que habla en su libro Master of the Eclipse, 2009), viaje y correspondencia pensando en el feminismo en Of Cities & Women (1993) y también el recuerdo de mi propia salida de Líbano.
El último día en Beirut fuimos a ver su exposición de pintura y tejidos en la Sfeir-Semler Gallery. Los lienzos y los tapices eran cuadros de color y eran mapas. El placer de buscar la voz no solo en el poema sino también en el rectángulo sólido de color, en el ensayo, en la forma blanda y dura de la montaña de Tamalpaís es fuerte como para evitarlo. Eso (esa búsqueda, ese placer) provoca una y otra vez la vuelta a ella, no dejar de buscarla.
Etel Adnan (Beirut 1925) estudió Filosofía en la Sorbonne de París. En 1955 emigró a Estados Unidos para realizar estudios de posgrado en UC Berkeley y Harvard. Fue profesora de filosofía en el Dominican College of San Rafael, California, entre 1958 y 1972. En 1972 regresó a Beirut y colaboró con Al Safa y L’Orient le Jour. Desde 1977 reside en Sausalito, California.
Página web de la autora: http://www.eteladnan.com
Publicaciones: http://www.eteladnan.com/publications
[Selección de poemas]
IV
Nadie te pidió que fueras un ángel
del miedo
ni siquiera de la muerte
Solo queríamos que tu piel fuese
tan suave
como el mar
una tarde de octubre
en Beirut, Líbano
entre dos guerras civiles.
Viniste
con un puñado de dolores
y una sonrisa
que partió el suelo bajo mis pies
como el terremoto
de dos personas
que se encuentran.
——
IV
No one asked yo to be an angel of
fear
or even of death
We only wanted your skin to be
as smooth
as the sea
an October afternoon
in Beirut, Lebanon
between two civil wars.
You came with a handful of pain
and a smile
which broke the ground under my feet
as the earthquake does
when two people
meet.
(De Love Poems)
Mis manos conocían la veta del mármol
y el sabor de la piedra
y las tumbas que se mueven
igual que el mar…
¡Oh mis padres enterrados bajo
el estrépito de las bombas!
¡Oh mis padres desaparecidos
en el Gran Silencio
que viaja más rápido que las galaxias!
Nunca van a oír la lluvia
que cae afuera
esta tarde…
——
My hands knew the grain of marble
and the taste of stone
and tombs as mobile as the sea…
o my parents buried under
the uproar of bombs
o my parents disappeared
into the Great Silence
which travels faster than galaxies!
they will never hear the rain
falling outside
this evening…
(De One Linden Tree, then Another Linden Tree)
Aves del paraíso me cubren
con sus plumas
mis pies están helados
mis labios agrietados
mi corazón, una bola de oro
y mi cama una rama
de un tilo
Dejo atrás mi cuerpo
en duermevela
para ir un laboratorio donde la libertad
se inyecta en un tubo de ensayo
Los ángeles me llevan en esta ascensión
y bebemos café
temprano
en un bar construido en la
luna…
Traeré la tinta, la llave y el secreto
en una página futura.
——
Birds of paradise cover me with
their feathers
my lips cracked
my heart a ball of gold
and my bed a branch from a
linden tree
I am leaving behind my slumbering
body
to go into a lab where liberty is
shut into a test tube
Angels are carrying me into this ascension
in the early hours we are
drinking a cup of coffee
in a bar built on the moon…
I will bring the ink the key and the secret
on a future page.
(De One Linden Tree, then Another Linden Tree)
* Traducción de Teresa Soto.